LOS ALIMENTOS, DE MERCANCÍA A BIEN COMÚN Y DERECHO HUMANO.
Cambiar el relato para cambiar el sistema.
En los actuales modelos dominantes de producción y consumo, los alimentos son tratados como una mercancía con la que especular, sometida a las reglas del mercado. Pero esta concepción de los alimentos como mercancía no es más que un relato que puede y debe ser cambiado. Los alimentos son esenciales para la vida, por lo que su acceso no puede estar determinado exclusivamente por el poder adquisitivo.
La transición hacia sistemas alimentarios justos y sostenibles requiere de una narrativa diferente, en la que se reconozcan y valoren las múltimples dimensiones de la comida.
Un relato no es más que una construcción social. Pero es este relato lo que luego se transforma en ideología y determina las políticas que son factibles y las que no, las que se priorizan y las que se descartan. Sirve de filtro entre lo deseable o realizable y lo que no se tiene en cuenta. Mientras no cambiemos el relato en torno a la alimentación no podremos sacar de la marginalidad a las alternativas alimentarias.
Actualmente, en el contexto europeo, no se discute que tanto la salud como la educación constituyen bienes comunes. ¿Qué pasaría si pasamos de tratar a los alimentos como una mercancía a gestionarlos como bienes comunes, públicos y como derecho humano?
Gustavo Duch
Trilogía LA HUERTOCRACIA (1/3)
Voces del barrio
Visiones, inquietudes, iniciativas y propuestas que conviven en el barrio
Comedor solidario Gregal
Cooperativa Gregal
Huerto urbano Fortaleza
Anthony
BESÒS VERDS
Dunia y Ramón
LA MAGIA DE LA COCINA
Mossen Jordi Espi
Parroquia Sant Paulí de Nola
BAYE
Asociación Senegalesa de Barcelona
Especialista
Los alimentos son esenciales para todas y todos, una fuente de placer, un hecho cultural, un derecho humano y un producto natural ... También se puede comerciar con ellos, pero el poder adquisitivo no puede ser una barrera para satisfacer nuestra necesidad y derecho a comer.
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José Luis Vivero Pol
Miembro del Observatorio del Derecho a la Alimentación de España.
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Materiales complementarios
22/07/2018 - Josep Cabayol, Siscu Baiges i Ester González - Crític
Si el 2050 hi ha 9.000 milions d'habitants al planeta, probablement no hi haurà prou menjar per mantenir l'actual patró alimentari, segons afirmen els experts. És possible avançar cap a una millor sostenibilitat/suficiència alimentària? Fins on podria abastir-se Catalunya amb la producció d'aliments pròpia? Són millors els comestibles de quilòmetre zero per fer front als nous riscos? La resposta depèn de si concebem l'alimentació com un negoci o l'entenem com un dret inalienable, i el menjar, com un bé comú.
GERMINANDO Espacio Agroecológico
Decálogo de reflexiones sobre agroecología y coronavirus
¿Por qué reflexionar sobre agroecología y coronavirus? ¿Qué relación tienen ambos conceptos? Como cooperativa dedicada al fomento de la agroecología, hemos estado especialmente atentas las medidas que se han tomado desde la administración pública y que han afectado de uno u otro modo al sistema agroalimentario, en especial, a los proyectos productivos e iniciativas agroecológicas o zonas rurales/periurbanas. Ahora, con un poco más de perspectiva, os compartimos este decálogo de reflexiones.
Conclusión, May 19, 2020, Entrevista a Marta Sánchez Miñarro, Por Alejandro Maidana
La soberanía alimentaria no es otra cosa que pensar la alimentación como un derecho
“La tierra proporciona lo suficiente para satisfacer las necesidades de cada hombre, pero no la codicia de cada hombre” Mahatma Gandhi.
De manera insistente y sin doblegarse, el camino estoico del debate sobre la soberanía alimentaria, avanza profundizando la necesidad de transformar aquellas matrices productivas que atentan contra las mayorías. La alimentación pensada como un derecho y no como la deshumanizante mercancía de los grupos económicos.
El País, 22/10/2014, José Luis Vivero
Cobertura Alimentaria Universal en España
Para Neruda, el hambre es la medida del hombre; para Miguel Hernández, el primero de los conocimientos. En cualquier caso, la sociedad española y su gobierno no salen muy bien parados puesto que cada vez se alzan más voces denunciando el drama de miles de hogares que ven como sus precarios ingresos no permiten comprar la comida necesaria para los hijos. En España hay hambre, aunque muchos no lo quieran reconocer, y está asociada a una elevada pobreza infantil (uno de cada tres menores).
eldiario.es, 17/10/2017, José Luis Vivero/Tomaso Ferrando
Politizar la alimentación para acabar con el hambre
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Solo cambiando nuestra concepción de los alimentos como mercancía podremos lograr que todo el mundo tenga acceso a suficiente comida cada día.
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Incluir la alimentación como un derecho en la Constitución y establecer un observatorio en su defensa representarían pasos en la dirección correcta.
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Considerar los alimentos como un bien común exige crear nuevos espacios para tomar decisiones democráticas sobre dónde, cómo y qué producir, basándose no solo en las leyes del mercado.